El Interior de la Iglesia
El interior es de tres naves, con otras tantas capillas en los testeros, inidividualizadas por arcos formeros de sección rectángular. La Capilla Mayor se abre a la nave mediante arco de triunfo ojival de sección gótica.

Las cubiertas han sufrido sucesivas reformas que las han privado del maderamiento de las naves. La Capilla Mayor tiene bóveda de crucería con terceletes, cruceros y ligaduras uniendo las claves, estas con decoración de temas florales y la plementería con yeserías barrocas dibujando figuras geométricas. Las capillas de las naves laterales se cubren con bóvedas de aristas.

La Nave Central se cubría con un artesonado que fue realizado por el carpintero Francisco Rodríguez Jiménez, carpintero vecino de Salamanca, quien el 4 de enero de 1555 obligó a hacer la dicha obra de carpintería de la dicha yglesia... en armadura bien estribada con los tirantes necesarios y su almizate debaxo apenazado y en los faldamentos dos guarniciones mas altas e otra baxa del mismo lazo y a la parte de la torre su copete en arte de armadura ochavada con sus rincones de artesones... la qual dicha obra a de fazer dentro de un año... .A los pies de la nave se levantaba la tribuna, sobre ménsulas, realizada en 1605 por el carpintero de Alaejos Alonso Calvo.
La Iglesia ha sufrido amplias y profundas reformas. A comienzos del siglo XVII, el visitador describía así el templo: iglesia de Sant Martín, de cantería y tapia real, bien enmaderada, con su Capilla Mayor de bóveda y una colateral a la mano izquierda, y la sacristía dentro de la Capilla... De lo que se deduce que posiblemente la planta primitiva era de dos naves, la Central y la del Evangelio, a la que se añadió posteriormente la de la Epístola.
A los pies de la nave de la Epístola, al lado de la Torre, hay una lápida con la inscripción: Se hizo el embaldosado y altares a lo romano siendo primer beneficiado el cura rector de esta yglesia don Antonio Martín Barbero. Hizo esta obra Antonio Pasqua. Año 1779.

La nave de la Epístola está presidida por un testero con un retablo dorado, sencillo, de tres calles y ático en semicírculo, adaptándose a la capilla. Flanquean la calle central estípites, y las laterales columnas que adornan sus fustes con elementos vegetales. La hornacina de la calle central y las laterales son de fondo plano y con repisas voladas.

El retablo cuenta que se hizo hacia 1710, año en que 508 reales que se dieron a Nicolás de los Reyes, vecino de Salamanca a quenta del retablo que mandó hacer su Ilustrísima.
En la capilla Mayor se encuentra colocado un retablo tetrástilo de un cuerpo en tres calles más ático entre machones que adornan sus fustes con elementos vegetales y flanqueado, al igual que las calles laterales, por roleos vegetales. Individualizan sus calles columnas salomónicas de cuatro espiras sobre altas ménsulas. Si la estructura del retablo es salmantina, hay elementos ornamentales en el marco del cuadro del ático y remate de la hornacina de la calle central que son ajenos a lo salmantino. El retablo es obra del maestro Francisco Martínez de Arce, vecino de Medina del Campo, a quien se pagaban en 1702 2554 reales a quenta del retablo que está haciendo para la dicha iglesia; en 1703 se le terminó de pagar, abonándose por tal concepto la cantidad de 2.006 reales, y ese mismo año se traía el retablo de Medina del Campo y se colocaba en la iglesia. En 1708, el maestro Ojeda, vecino de Cantalapiedra, recibía 7.000 reales por el dorado.

En la visita de 1709, se mandaba hacer un retablo colateral que haga correspondencia con el de Nuestra Señora para la nave del Evangelio. La obra se encarga al maestro Pedro de Gamboa quien recibía 1410 reales de vellón, los mismos que tiene pagados a Pedro Gamboa, a cuenta de un retablo para dicha iglesia. Está flanqueado por columnas salomónicas y estípites, compuesto por tres calles, potenciada la central al estar las laterales en esviaje, creando así un planta movida. Las hornacinas son aveneradas y la central cobijada por guardamalleta. En el ático encontramos un relieve del Padre eterno en la Gloria.

En el siglo XVII se hicieron diversas obras en la iglesia.En 1605, el pintor Juan López doraba el altar de Nuestra Señora, recibiendo por la labor la cantidad de 200 reales. Años más tarde, en 1612, Alonso Calvo, carpintero de Alaejos, recibía 30 reales por hacer la traza para la Sacristía.
En 1623 se renovaba el Retablo Mayor, corriendo a cargo de los maestros Francisco Rodríguez y Baltasar Trohers, ambos vecinos de Peñaranda.
Le han seguido diversas reformas, la más polémica en los años 80 en donde se eliminó el artesonado en madera sustituyéndolo por placas de aislante de color plateado. Se hizo otra reforma posterior sustituyendo estas placas plateadas por otras de color blanco
Se encuentran en el exterior de la Iglesia marcas de los maestros que hicieron obras menores como las que se muestran en las fotografías.

